Por insistencia de Hoffman, Goertz elaboró algunos bocetos de un BMW deportivo y los mandó a la central de Munich. A la vista de los dibujos, los de BMW hablaron con Goertz y lo contrataron como coordinador del proyecto para desarrollar un deportivo con motor V8, el modelo que después sería conocido como BMW 507. Sin embargo, la historia no iba a ser tan sencilla, pues para rentabilizar el futuro deportivo era preciso aprovechar el bastidor tubular de las berlinas 502 y diseñar asimismo un coupé y un descapotable, ambos con espacio interior para admitir cuatro plazas.
En el Salón de Frankfurt de 1955, celebrado en septiembre, se presentó la ampliación de la gama con los BMW 503 Coupe, 503 Cabriolet y el roadster 507. Tanto la prensa especializada como el público asistente se quedaron maravillados ante estas tres novedades de la marca bávara, cuyo cabriolet 503 era el primer automóvil alemán con capota eléctrica, disponiendo el coupé 503 de accesorios tan refinados como tapicería de cuero, elevalunas eléctricos en las cuatro ventanillas, una radio Becker con búsqueda automática de emisoras o un sistema eléctrico lava-limpiaparabrisas.
Nadie es perfecto, y unos precios excesivamente altos iban a impedir que los 503 y 507 alcanzasen el nivel de ventas esperado. Por una pura cuestión de orgullo, los 39.900 francos suizos que costaba un BMW 503 Coupe en 1957 eran cien más de lo que Mercedes pedía por un 300 SL Roadster, cifras que superaban en más de un diez por ciento lo que había que pagar por un potente Aston Martin DB 2/4. Todo ello mientras que para hacerse con un Jaguar XK 150 Coupe bastaba con abonar "sólo" 24.500 francos suizos y un Lancia Aurelia B20 estaba en 26.500. Y si saltamos el Atlántico, la producción yanqui ofrecía un variado muestrario de grandes coupés, todos ellos con motor V8, cambio automático y un completo equipamiento al que se le podían añadir en opción numerosos accesorios. En esa situación resultaba bastante difícil la promoción comercial de los 503 y 507. De hecho, en el propio Salón de Frankfurt el importador americano Hoffman renunció a su proyecto de encargar 1.500 unidades/año, tras ver como los interesados en estos modelos torcían el gesto al enterarse del precio. El resultado fue que durante los cuatro años escasos en producción, de Munich sólo salieron 273 unidades del BMW 503 Coupé, 139 BMW 503 Cabriolet y 252 BMW 507.